Jugando mientras aprendemos

 

El inicio de clase fue dado por la maestra titular Yuly, quien comenzó con la clase de física. Sin embargo, surgio un inconveniente ya que algunos alumnos no deseaban participar en las actividades físicas. Esto representó un desafío para la maestra, quien debía encontrar la manera de motivar a los alumnos y lograr que participaran en las actividades.

La maestra Yuly intentó explicar la importancia de la participación en las actividades físicas, pero algunos alumnos seguían mostrándose renuentes. Decidio entonces, cambiar su estrategia y ofrecer opciones alternativas para aquellos que no deseaban participar en las actividades físicas. Esto permitió que los alumnos se sintieran más cómodos y motivados a participar en la clase.

A pesar del inconveniente inicial, la maestra Yuly logro superarlo y la clase de física continuo de manera exitosa. Los alumnos aprendieron de manera interactiva y divertida, y la maestra pudo evaluar su comprensión de los conceptos físicos. Al final de la clase, los alumnos salieron con una sonrisa en el rostro, habiendo aprendido y disfrutado del proceso.

Luego de superar el inconveniente inicial, la maestra Yuly decidió realizar la actividad del teléfono utilizando vasos y estambre. Los alumnos se mostraron entusiasmados y curiosos por esta actividad práctica y divertida.

La maestra Yuly les explicó que debían colocar un vaso sobre la mesa y estirar el estambre hasta el siguiente vaso, creando una especie de "teléfono" casero. Luego, les pidió que susurraran un mensaje en uno de los vasos y que el alumno del otro extremo del "teléfono" intentara escuchar y repetir el mensaje.

Hubo vasos que funcionaron perfectamente, y los alumnos se sorprendieron de cómo podían escuchar claramente el mensaje a través del estambre. Sin embargo, otros vasos no funcionaron tan bien, y los alumnos se preguntaban por qué.

La maestra Yuly les explicó que el material utilizado, en este caso, los vasos y el estambre, tenía un impacto en la transmisión del sonido. Les explicó que el sonido se propaga mejor a través de materiales sólidos y que el estambre no era el material más efectivo para transmitir sonido.

A pesar de los resultados variables, la actividad logró su propósito de hacer que los alumnos usaran su sentido del oído y comprendieran cómo se propaga el sonido. Los alumnos aprendieron de manera interactiva y divertida, y la maestra Yuly pudo evaluar su comprensión de los conceptos científicos involucrados.